La soledad se sienta al lado mío,
de noche al mediodía en la alborada.
Yo la miro y me mira,
y le pregunto: ¿de dónde vienes?, habla.
De un desierto me dice, de un desierto,
tendido en sus arenas abrasadas.
De un bosque cuyos pájaros murieron,
de una noche demasiado larga.
De las sombras de un tamplo abandonado,
entre las cuales los recuerdos andan,
como alondras heridas y sin nido,
buscando sitio en que morir calladas.
De una llanura que crucé de prisa,
en la noche, después de una batalla.
Vengo aquí desde muy lejos,
vengo desde el fondo de tu alma.
Rubén Gálvez
sábado, 3 de mayo de 2008
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1 comentario:
La soledad de Rubén Gálvez, fue una soledad encaminada hacia la paz y a la tranquilidad. Si analizas cada verso con lupa de buen lector, cada uno encierra una verdad perfecta y con justicia literaria para el tema de la soledad.
Una de las personas que más han marcado mi vida, mi forma de pensar, el mejor de los ejemplos que puedo tener de alguien a quien llamo amigo, que en verdad son pocos y que después de muertos siguen vivos. El único poema que me quiso mostrar, era muy celoso con sus cosas. Todo se lo llevó consigo. Sería fortuito encontrar más textos de él. Extraño al "teacher". Gracias por publicar este poema en tu blog Melissa.
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